Lucerna, Suiza
Lucerna, Suiza, es una de las ciudades turísticas más interesantes del país helvético. Situada en la orilla del Lago de los Cuatro Cantones y a los pies de los Alpes, contiene alguno de los monumentos más emblemáticos del país.
El principal símbolo de Lucerna es el Puente de la Capilla. Se trata del puente de madera más antiguo de Europa –datado en 1333-, que supera el río Reuss. Además de la belleza propia del puente, si lo cruza, podrá deleitarse con los paneles pintados con escenas religiosas e históricas de la ciudad.
En medio del puente podrá encontrar la Torre del Agua, una curiosa atalaya de piedra que, curiosamente, es más antigua que el propio puente. Hoy en día es une tienda de souvenirs, pero en otros tiempos llegó a ser un puesto de guardia y un archivo municipal. La panorámica de la torre y el puente es una de las fotografías más conocidas y buscadas de Suiza.
Un poco más abajo del Puente de la Capilla se encuentra otra pasarela, el Puente Spreuer, que a menudo se ve eclipsado por la fama del Puente de la Capilla. Al igual que su compañero unos metros más arriba, está decorado con pinturas, aunque la temática es bastante más macabra, ya que representan a la Muerte y su diabólica danza. La razón de esta temática se encuentra en el siglo XIV, cuando fue construido el puente. Por aquel entonces Europa estaba bajo el manto de la Peste Negra, que sembró la muerte y el desánimo por todo el continente, incluyendo Lucerna.
Cuando visite Lucerna, Suiza, tampoco puede perderse otro de los grandes monumentos del país, el León Moribundo. Cuando contemple este felino y su expresión de dolor y tristeza, bellamente tallado en la roca viva, seguramente se conmoverá.
Esta escultura fue tallada en recuerdo de los 700 mercenarios suizos que murieron al defender al rey Luis XVI durante la Revolución Francesa. La ciudad de Suiza quiso homenajear a estos héroes nacionales con este animal, que simboliza la valentía y el coraje.
Por el centro urbano de la ciudad encontrará pintorescas callejuelas rodeadas de coloridas casas que dan alegría y encanto a Lucerna. Callejeando podrá encontrar la Iglesia Jesuita, el primer edificio barroco de Suiza. Su interior, cubierto de pinturas es todo un espectáculo que no puede perderse.
Por último, al visitar Lucerna, Suiza, no podrá dejar de ver el Monte Pilatos, cuya silueta acuna a la ciudad. Según la leyenda Poncio Pilatos fue enterrado en esta enorme montaña, a la que dio su nombre. Como curiosidad, esta montaña alberga el ferrocarril de cremallera más empinado del mundo, con desniveles que llegan a alcanzar el 48%.
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